La fisioterapia neurológica es un área de la fisioterapia que se centra en el tratamiento de las deficiencias y discapacidades físicas causadas por trastornos neurológicos.
Este tipo de terapia ayuda a mejorar el movimiento, la fuerza y la coordinación, así como a reducir el dolor y mejorar la calidad de vida en general.
Es una forma vital de tratamiento para quienes padecen trastornos neurológicos como ictus, lesiones cerebrales traumáticas, lesiones medulares, esclerosis múltiple, enfermedad de Parkinson y parálisis cerebral.
Mediante una cuidadosa evaluación del diagnóstico de la persona, los fisioterapeutas pueden elaborar un plan de cuidados adaptado a sus necesidades que incluye diversos tratamientos como estiramientos, fortalecimiento y actividades de equilibrio.
Mediante estos tratamientos, los fisioterapeutas pueden ayudar a mejorar el funcionamiento físico, minimizar el dolor y mejorar la calidad de vida de las personas con trastornos neurológicos.
1.¿Qué es la fisioterapia neurológica?
La fisioterapia neurológica, como hemos comentado anteriormente, es un área de la fisioterapia que se centra en el tratamiento de las deficiencias y discapacidades físicas causadas por trastornos neurológicos.
El objetivo de esta terapia es mejorar la capacidad de una persona para moverse, realizar tareas cotidianas y reducir el dolor mediante ejercicios y movimientos específicos.
La fisioterapia neurológica puede ser útil para personas que han sufrido un ictus, una lesión cerebral traumática, una lesión medular, esclerosis múltiple, enfermedad de Parkinson y parálisis cerebral.
Aunque estos trastornos tienen causas y síntomas diferentes, la fisioterapia neurológica puede utilizarse para ayudar a tratar estas afecciones y mejorar la calidad de vida de una persona.
Tipos de trastornos neurológicos que pueden tratarse
Hay muchos trastornos neurológicos que pueden tratarse con fisioterapia neurológica.
Algunos ejemplos de estos trastornos son el ictus, la lesión cerebral traumática, la lesión medular, la esclerosis múltiple, la enfermedad de Parkinson y la parálisis cerebral.
Los trastornos neurológicos son enfermedades que afectan al sistema nervioso, formado por el cerebro, la médula espinal y los nervios. Un ictus se produce cuando se bloquea el flujo sanguíneo al cerebro, causando una lesión cerebral.
Las lesiones cerebrales pueden producirse tras un ictus, una lesión traumática, una infección o una enfermedad, como un tumor cerebral, o tras la formación de un coágulo o la rotura de un vaso sanguíneo en el cerebro.
Una lesión cerebral traumática puede deberse a un golpe en la cabeza, como una caída o una lesión deportiva, o a una lesión penetrante, como una herida de bala o una caída desde una altura.
Una lesión medular (LME) se produce cuando se lesiona la médula espinal, que está formada por fibras nerviosas que viajan desde el cerebro al resto del cuerpo.
Las lesiones pueden producirse tras una caída o un accidente de coche, o si se cae de un caballo o es arrojado desde un vehículo en marcha.
La esclerosis múltiple es una enfermedad degenerativa del sistema nervioso central que daña la mielina, una vaina grasa que rodea las fibras nerviosas, y provoca inflamación en el cerebro y la médula espinal.
La enfermedad de Parkinson es un trastorno degenerativo que afecta al cerebro, provoca temblores y lentitud de movimientos, y a menudo conduce a la discapacidad.
La parálisis cerebral es un daño en el cerebro en desarrollo que se produce durante el embarazo o el periodo neonatal, causando problemas de movilidad.
Otros trastornos neurológicos son la enfermedad de Alzheimer, las lesiones oculares traumáticas y los accidentes cerebrovasculares.
2.Beneficios de la fisioterapia neurológica
La fisioterapia neurológica se utiliza para mejorar la movilidad y la coordinación, así como para aliviar el dolor del paciente.
Suele utilizarse como parte del tratamiento de trastornos y lesiones neurológicas con el objetivo de ayudar al paciente a recuperar el movimiento y recobrar la mayor funcionalidad posible.
En algunos casos, puede utilizarse como único tratamiento para un trastorno o afección.
– La fisioterapia neurológica puede mejorar la movilidad y la coordinación en personas con una amplia variedad de trastornos neurológicos.
Por ejemplo, en pacientes que han sufrido un ictus y tienen problemas para mover ciertos músculos de los brazos o las piernas o problemas de equilibrio, en personas con esclerosis múltiple que tienen problemas para caminar o mantener el equilibrio y en personas con enfermedad de Parkinson que tienen problemas para controlar el movimiento.
– También puede aliviar el dolor en pacientes con diversos trastornos neurológicos.
Esto incluye a los enfermos de Parkinson, que pueden experimentar dolor en los músculos, los enfermos de esclerosis múltiple, que pueden experimentar dolor en las articulaciones, y los enfermos de lesiones medulares, que pueden experimentar dolor en las zonas próximas a la lesión.
3.Tipos de tratamientos utilizados en fisioterapia neurológica
En la fisioterapia neurológica pueden utilizarse diversos tipos de tratamientos. Pueden incluir ejercicios de estiramiento, fortalecimiento, equilibrio y coordinación.
Otras técnicas de tratamiento que pueden emplearse en la fisioterapia neurológica son los ejercicios terapéuticos, el tratamiento con calor o frío, la estimulación eléctrica, la acupuntura y el masaje.
– Estiramientos: se puede pedir a los pacientes que realicen ejercicios de estiramiento suaves.
Esto puede hacerse antes de una sesión de ejercicios para calentar los músculos y preparar el cuerpo para el movimiento o después de una sesión de ejercicios para ayudar a los músculos a relajarse.
Dependiendo del trastorno específico que se esté tratando, se puede pedir a los pacientes que estiren los brazos, las piernas, el cuello, la espalda u otras zonas del cuerpo.
– Fortalecimiento: Se puede pedir a los pacientes que hagan ejercicios para fortalecer determinados músculos.
Esto puede hacerse moviendo los músculos afectados contra resistencia con la ayuda de un terapeuta o moviendo los músculos no lesionados del cuerpo del paciente.
– Ejercicios de equilibrio y coordinación: Estos ejercicios tienen por objeto mejorar el equilibrio y la coordinación del paciente.
Pueden incluir ponerse de pie sobre un pie, caminar sobre superficies irregulares, sentarse o tumbarse y realizar pequeños movimientos con el cuerpo, como abrir y cerrar las manos o doblar y estirar las piernas.
Otros ejercicios que pueden utilizarse en fisioterapia neurológica son los ejercicios oculares para personas que han sufrido un ictus o una lesión ocular traumática, los ejercicios que se utilizan para ayudar a mejorar la movilidad de las personas con EM y los ejercicios respiratorios para personas con LME.
Cómo evalúa un fisioterapeuta a un paciente
Un fisioterapeuta trabajará con el paciente para desarrollar un plan de cuidados integral.
Durante este proceso, el fisioterapeuta preguntará al paciente sobre sus síntomas actuales y el tipo de tratamiento que le interesa, como ejercicios de estiramiento y fortalecimiento.
El terapeuta también realizará una serie de pruebas para evaluar la fuerza muscular, el equilibrio y la coordinación del paciente. Esto proporcionará al terapeuta información que podrá utilizar para crear un plan de cuidados individualizado que se adapte a las necesidades del paciente.
Por ejemplo, una evaluación puede mostrar que un paciente tiene una fuerza reducida en el brazo derecho. Esta información puede utilizarse para crear un programa de ejercicios diseñado para aumentar la fuerza del brazo derecho.
Preparación para una sesión de fisioterapia neurológica
Antes de iniciar una sesión de fisioterapia neurológica, puede ser útil dedicar unos momentos a prepararse.
Puede ser una buena idea escribir un diario antes de la sesión para sacar sus pensamientos y sentimientos de su cabeza y ponerlos sobre el papel.
Esto puede ayudarle a relajarse y despejar la mente, y es una forma estupenda de empezar la sesión. También puedes traer algo de música que te guste o una vela aromática para relajarte.
También puede ser útil volver a escribir en un diario o meditar después de la sesión para ayudar a consolidar las ideas y conceptos aprendidos durante la sesión.
Cómo aprovechar al máximo una sesión de fisioterapia neurológica
Es importante estar preparado y listo para participar activamente en su sesión de fisioterapia neurológica. Asegúrese de hidratarse antes de la sesión y de tomar una comida nutritiva de antemano para tener la energía necesaria para participar en los ejercicios.
También es importante que sea sincero con su terapeuta sobre cómo se siente, incluido cualquier dolor que pueda sentir. Esto ayudará a su terapeuta a crear un plan de cuidados individualizado que se adapte a sus necesidades.
Durante la sesión, puede ser útil escribir en un diario o meditar de nuevo después de la sesión para ayudar a solidificar las ideas y conceptos aprendidos durante la sesión.
Llevar un diario puede ser una forma útil de procesar la información aprendida durante la sesión y ponerla en un formato que puedas consultar y sobre el que puedas reflexionar más adelante.
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