La fascitis plantar es una patología que se manifiesta como un dolor punzante que se produce cuando el paciente camina. Es una de las causas más comunes del dolor de talón, e implica la inflamación de una banda gruesa del tejido de la planta del pie que conecta con la fascia plantar.
El fuerte dolor que produce la fascitis plantar suele aparecer en los primeros pasos de la mañana o después de un periodo de inactividad.
Se desconocen las causas exactas que provocan la aparición de la fascitis plantar. Por lo general, suele darse en personas que soportan una gran carga física o que sufren sobrepeso.
- ¿Qué es la fascitis plantar?
- Principales síntomas
- Causas de la fascitis plantar
- Tratamientos recomendados
¿Qué es la fascitis plantar?
La fascia, es un tejido conectivo, es decir, un material biológico que conecta los diferentes tejidos y órganos del cuerpo.
La fascia plantar está situada debajo de la base del pie, y se extiende desde el tubérculo medial del calcáneo (hueso del talón), unido a fibras del tendón de Aquiles, hasta la parte delantera del pie. También recubre los metatarsos, y se divide en cinco secciones.
La fascitis plantar suele ser un proceso inflamatorio, consecuencia de una sobrecarga, desencadenada por, situaciones de sobrepeso, de alteración biomecánica de la pisada o exceso de ejercicio.
Puede ir acompañada de sobrecrecimiento óseo, conocido como ‘espolón calcáneo’ que suele ser asintomático.
Síntomas de la fascitis plantar
La fascitis plantar causa un dolor punzante en la parte interna del talón que suele desaparecer con los primeros pasos y acostumbra a remitir a medida que se va retomando la actividad física. Esto suele darse durante períodos de tiempo prolongados en los que el paciente pasa mucho tiempo de pie o sentado.
En el caso de los deportistas y la fascitis plantar, sus síntomas se manifiestan por la mañana y después de realizar deporte.
Esta patología puede llegar a ser muy limitante tanto para la actividad deportiva como para la vida normal del paciente por lo que iniciar un tratamiento precoz ayuda a evitar que se agudizen los síntomas.
El principal síntoma de la fascitis plantar es el dolor calcáneo, que se puede extender hacia la parte delantera del pie, aumentando las molestias con la palpación o flexión dorsal del pie.
Normalmente, el dolor provocado por la fascitis plantar suele aparecer de manera progresiva. Cuando los movimientos cambian, y tras caminar un poco, el tejido de la fascia se estira.
Causas de la fascitis plantar
Se barajan algunos factores como causa de la fascitis plantar. La principal viene determinada por las alteraciones biomecánicas que, durante la marcha, inciden sobre nuestra fascia plantar, produciendo sobrecargas de repetición.
A esta causa se pueden sumar otras añadidas, como los pies cavos o planos, acortamiento de la cadena muscular posterior, obesidad o calzado inapropiado.
Otro factor a tener en cuenta es la rigidez articular o falta de movilidad de los tobillos, especialmente hacia la flexión dorsal del pie.
La fascia plantar tiene forma de arco, sostiene al pie y absorbe el choque al caminar. Si la tensión del pie y el estrés aplicado a dicho arco exceden los límites fisiológicos, aumenta el riesgo de lesión en la fascia.
Algunos factores aumentan el riesgo de desarrollar esta afección:
- Edad: suele ser más común en personas entre los 40 y 60 años, debido a que la estructura ósea del cuerpo humano empieza a deteriorarse.
- Calzado inadecuado: las sandalias y el calzado básico como deportivas o zapatos con poca amortiguación, pueden ser causas también de la fascitis plantar.
- Sobrepeso: el exceso de peso ejerce una presión adicional sobre la fascia plantar.
- Alteración de la pisada: el pie plano o pie cavo, incluso un patrón anormal de caminar puede afectar a la forma en que se distribuye el peso al caminar. Esto puede ocasionar una mayor tensión en la fascia plantar.
- Ciertos tipos de ejercicios: la actividad deportiva que ejerza mucha presión sobre el talón y sus tejidos adheridos puede causar daños que influyan en el desarrollo de la fascitis plantar. Los deportes con mayor probabilidad de provocar fascitis plantar son la danza aeróbica o aquellos que se produzcan carreras de larga distancia.
Otras causas: algunas afecciones menos comunes que pueden dañar nuestra fascia son:
- Tendón de Aquiles corto
- Musculatura del pie débil
- Trabajos en los que hay que mantenerse de pie: algunas ocupaciones pueden considerarse un factor de riesgo
Tratamiento de la fascitis plantar
Los tratamientos para la fascitis plantar deben tener un protocolo ordenado y personalizado a cada paciente para ser lo más específicos posible.
La mayoría de los casos, el paciente con fascitis debe acudir al especialista para tratarse de forma precoz y evitar la cronificación. Lo primero que se realiza es un estudio de la pisada para valorar los factores biomecánicos que pueden estar condicionando el proceso.
Los primeros tratamientos a realizar son los siguientes:
- Terapia manual ortopédica
- Reposo: reducir o incluso suspender todo tipo de actividades que empeoran el dolor. Además de suspender actividades atléticas en las que los pies impactan con superficies duras (correr).
- Diatermia: genera revascularización
- Punción seca
- Hielo: pasar los pies sobre una botella de agua fría o hielo durante 20 minutos. Esto debe hacerse 3 o 4 veces al día.
- Medicamentos antiinflamatorios no esteroideos: ibuprofeno o naproxeno, tratamientos que reducen el dolor y la inflamación.
Todo ello se decide en función de las necesidades y evolución de la patología de cada caso.
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